jueves, 19 de noviembre de 2009

Creditos agrarios en el tiempo



Uno de los procesos legales que más durará de esta gestión del Gobierno Regional de Loreto son los créditos agrarios. Al final nos perderemos en la maraña de las cifras pequeñas entregadas a los agricultores y los mandos intermedios embarrándose de costumbre, mientras tanto cabe plantearse si deben o no seguir entregándole dinero a este sector.


Hace unos años cuando el dólar MUC (dólar de mercado único de cambio) instaurado en el primer gobierno de Alan García, campeaba para favorecer algunos empresarios y se empezaba hablar de corrupción o de algunos beneficios dirigidos a sectores que no lo merecían, el presidente de entonces salió con una respuesta típica de las que suele dar para acallar las críticas y hacer pensar en que alguna vez los malos procedimientos económicos pueden tener un feliz objetivo, talvez nunca buscado. Algo de eso puede estar sucediendo con un cargamontón que se ha hecho en función a los créditos agrarios en la región Loreto que tiene que ver con un margen mínimo de recuperación que imagino era previsto por cualquier decisión que pasa a tener al agricultor como beneficiario.
¿Cuáles eran los objetivos del dólar MUC? Seguramente los mejores al momento de su planteamiento. (Partiendo de la premisa que ningún gobierno nacional o regional actúa deliberadamente para el mal), lo que entonces buscaba el dólar MUC eran tres cosas: que el Estado compre dólares a precio normal, los subsidiaba y luego los vendía a un precio menor para los empresarios nacionales, estos deberían usarlo exclusivamente para sus industrias, ¿Cuándo falló esta intención? Cuando los empresarios peruanos, que nunca creyeron en la economía nacional, que desde el siglo XVI hasta ahora siempre se consideraron europeos porque añoraban la vida del ocio y la discriminación, empezaron a utilizar estos dólares en sus cuentas personales generándose una descomunal corrupción.
De estos ejemplos hay varios en nuestra historia, desde la idea monarquista de Rufino Echenique de crear una oligarquía peruana regalándoles las ganancias del guano y del salitre y despreocupándose por la defensa nacional, mientras Chile se armaba hasta los dientes y se apoyaba en la Inglaterra colonial para apoderarse de nuestra riquezas y territorio, hasta una ceguera dirigida en torno al salvajismo de los procedimientos de extracción del Caucho y luego del petróleo en zonas donde los derechos y poblaciones eran diezmadas o inexistentes. Y siempre había respuestas en la historia para justificar los latrocinios y la corrupción. Nuestra sociedad era inmadura, requería de una clase dominante que ejerciera su rol formador y ya en el gobierno de Alan García cuando el dólar MUC hacía su trabajo el mandatario ante la crítica por hechos de corrupción en cuanto a la moneda salió con el argumento que sí alguien se había beneficiado al perder el Estado estos subsidios esas perdidas en realidad no eran tales y estaban en lo que con ese dinero se había podido comprar la gente, está en el televisor, en el refrigerador, en la cocina, o en el estómago, adujo el primer mandatario entonces.
Ahora que se habla que los créditos agrarios han sido motivo de denuncias de presunta corrupción en el Gobierno Regional de Loreto talvez ha sucedido porque de arranque estos créditos fueron mal planteados, es decir, el 12% del canon petrolero para el sector agrícola en una región que no es agrícola por excelencia suena a la ignorancia de un Estado y su dirigencia que no conoce ni siquiera su territorio. Los especialistas han hablado hasta la saciedad que la agricultura no va ser el destino feliz de la selva baja por una serie de motivos que van desde la fragilidad de sus suelos hasta la venta de servicios ambientales que podrán generar muchos mayores recursos en el futuro. Era lógico que el retorno del crédito tuviera problemas. Si a un agricultor en el norte del Perú, en cualquier entidad bancaria es considerado como una persona cuyo crédito es altamente riesgoso, con mayor razón en la Amazonía, ese agricultor no sólo no tiene crédito, ni siquiera es considerado.
¿Hizo mal el Gobierno Regional en plantear su lema de región productiva incidiendo en los créditos agrarios? – que además todos los que ahora critican reclamaban su ausencia antes de este periodo y que incluso se denunciaba a gestiones anteriores por no obedecer la ley del canon de entregar este porcentaje al agro – Si la premisa era la misma, es decir darle al agricultor una sola herramienta como es el capital y quedar desvalida en las otras, entonces lo único que se ha conseguido es superar los niveles de pobreza en porcentajes mayores al 15% como lo señaló el INEI y por ahí alguien podrá decir que sólo ese hecho de salir de la extrema pobreza en niveles matemáticos es suficiente. Aunque no cuente en réditos políticos urbanos, sin duda habrá un fuerte y grueso sector agrícola que pensará que estos créditos son naturales e intrínsecos a su condición, de ahí que muchos pobladores y dirigentes hablen de descomunales borracheras, de despilfarros y desordenes con el uso de los créditos, pero eso sucede normalmente cuando se entrega capital con el riesgo ya consabido. Así ha pasado con el Programa Juntos en la sierra donde se acusaba que muchos pobladores esperaban esta remuneración estatal para terminársela en licor en unas cuantas horas.
¿Los asistencialismos son malos? No necesariamente, no sólo lo plantean los izquierdistas como bandera sino también muchos liberales que consideran que el Estado es muy lento para poder legitimizarse con inversión en las localidades más recónditas y pobres y prefieren la entrega directa de parte de los presupuestos de la región, por ejemplo, ¿alguien se opondría a que el Gobierno Regional entregue, vía padrón y censo inmediato, útiles escolares, medicinas gratuitas, construya sistemas de agua y electrificación en Balsa Puerto el distrito con mayores niveles de pobreza en el Perú que lamentablemente se encuentra en Loreto? Es más, muchos liberales (entre los que yo apoyaría) dirían que en esta zona debería haber un reparto directo del dinero del canon petrolero a cada familia de la zona para salir de esa vergüenza que deberíamos sentir todos los que vivimos en Loreto.
Si hace años estos créditos se hubieran implementado de una manera sistemática, ahora de repente estaríamos hablando de los problemas de su implementación, es decir de las formas más ya no del fondo. Siempre se ha pensado que los programas sociales tienen que tener un factor riesgo cero en cuanto a su implementación y eso no sucederá jamás, menos en una sociedad donde las instancias intermedias son las que realmente perjudican los objetivos cruciales. El agricultor ahora debe saberse que está mejor alimentado e implementado a costa de que ese procedimiento del crédito será uno de los procesos legales que de repente lleven largos años comprobar por donde se filtraron y en qué momento se beneficiaron los corruptos del sistema. Muchas veces es más fácil hacer una obra magnífica o espectacular primero porque “se roba” más fácil, se deja algo “imperecedero” para los ojos y se utiliza como propaganda permanente, pero al final siempre será lo más fácil.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Susurros de corrupción

- Carta de un profesor desesperado antes de dar su examen de nombramiento

"Estoy en un curso de capacitación en un colegio nacional donde participan cerca de 300 profesores igual que yo que aspiran a ser nombrados en este examen del domingo 15 de noviembre en una de las más de cinco mil plazas que hay en todo Loreto. Me esfuerzo cada día, investigo, hago mis tareas, corrijo mis exámenes de lógico matemática, de razonamiento y de comprensión lectora. Fallo mucho porque cada vez los profesores ponen las pruebas más difíciles a medida que se acorta el tiempo. Tengo un grupo que se dedica de verdad a estudiar, vamos por las tardes a casa de cada uno de nosotros, apenas salimos del colegio a la casa empezamos a concentrarnos con separatas de cultura general que bajamos de Internet, con acertijos o exámenes de concursos anteriores que ahora nos resultan “papayitas”, pero igual no nos confiamos, seguimos estudiando porque aspiramos a que todo va ser honesto, que esta vez los exámenes no se van a “filtrar” por debajo de la mesa, esperamos que esta vez la Policía y fiscalía no se hagan los cojudos y que los funcionarios de la Dirección de Educación – por una vez en su vida – tengan algo de decencia y no se dejen llevar por los sobres de la corrupción.


Ya no podemos más. Ayer, por ejemplo, nos amanecimos hasta las tres y media de la madrugada practicando unas analogías que habían llegado de una academia limeña que – dicen – también prepara a docentes de esa ciudad para el bendito examen. Hemos pagado 50 soles para que nos capaciten en estas dos últimas semanas, aunque los profesores que nos enseñan no son cosa de otro mundo, nos motiva que volvamos a las carpetas con cara de alumnos para aprender a fuerza de costumbre, algo que nosotros les pedimos a diario a nuestros educandos. Todos acuden religiosos temprano y en los patios del colegio donde nos capacitamos no se habla de otra cosa que no sean fórmulas, claves, resoluciones ministeriales, leyes, declaraciones del director regional, posiciones del Sutep, o de los lugares en la región donde habría mayor oportunidad si es que pasamos a una segunda etapa. “Créeme Héctor”, estamos convencidos que este examen podría ser uno de los más limpios si no fuera porque hace una semana empezó la misma cantaleta de las claves compradas de los cuadernillos con las preguntas, de los funcionarios echados y hasta de los “compañeros” metidos en este tema de beneficiarse con el examen de nombramiento. Y para nosotros todo ha vuelto a desanimarnos, porque del grupo de cinco profesores que éramos pétreos estudiosos, ahora dos de ellos han dicho que aceptarán la propuesta de comprar el examen y se han retirado a esperar que el dinero se imponga al mérito.

Porque ya nos han entregado una propuesta de lo que serán supuestamente las preguntas que coinciden con los porcentajes que ha publicado el ministerio para cada especialidad. Ahora la corrupción todo lo ha prostituido porque lo que era un ambiente de reflexión, debate y estudio por estos días todo mundo ha empezado a organizar la mejor estrategia de la pendejada. Son cien preguntas para todos y no te imaginas como estás han sido inventadas en su manera de ser plagiadas o como se podría elaborar un “taquito” de tal manera que no haya el mayor problema para poder hacer trampa el día domingo. Héctor, no sabes las ideas extravagantes y desesperadas de los profesores, por ejemplo te cuento que un grupo de mujeres ha dicho que se pintarán las uñas de un color determinado con puntitos que señalen una alternativa por cada dedo. Es un lenguaje tan matemático como increíble, otros han elaborado una manera de persignarse que delata en realidad una forma de mostrar la A, B, C, D o E, que son las alternativas por cada pregunta, es un desmadre, aún así yo quiero creer que hay esperanzas que no sean otra cosa que blufs de la corrupción generalizada en el sector.

¿Tú crees que otra vez nos jodamos los que intentamos estudiar? ¿Tú, que estas metido en esto del periodismo, crees que la cosa está tan jodida por todos lados? ¿será cierto que a una semana del examen ya esté circulando a vista y paciencia de todos sin que nadie haga nada? Porque, te cuento que yo he visto las preguntas, han traído el cuadernillo a los salones y con pana y elegancia los ofrecen a 1500 soles, los “colegas” se han organizado en grupos y ya hay varios que han hecho su “chanchita” y están dividiéndose las preguntas para resolverlas. A mi me han pedido 300 soles, pero me dicen que no pagaría ahora sino después del examen, es decir, luego que se compruebe que fueron las mismas preguntas. Eso me carcome el cerebro, no me deja concentrarme y estoy a punto de comprar esta ilusión. ¿Tú te debes recordar man? Esa gente que se nombró comprando preguntas, salieron en la televisión los premiaron delante de los colegas, pero ellos no se comieron el cuento por eso los abuchearon cuando se fueron a recoger sus resoluciones, ustedes nomás, los periodistas (¿debo decir sachas?) fueron los que no quisieron decir nada ¿te acuerdas?

¿Ahora has hecho el seguimiento de esos profesores?, sabes por ejemplo que uno de ellos está procesado por pegarle a un alumno en pleno colegio porque pretendió supuestamente a su mujer, que también se nombró con estos exámenes filtrados, no sabes cómo lo señalan sus colegas, todos saben, hablan a sus espaldas, los alumnos se ríen de ellos porque ni enseñar saben. Todos sabían, menos ustedes, los periodistas que no dijeron nada ahhh y las autoridades, pero en ellos se entienden sólo quieren aparecer en las fotos, pero ustedes, en fin no te canso porque de repente ni siquiera vas a leer mi preocupación. No importa voy a seguir estudiando, así no apruebe y no obtenga mi nombramiento y de repente tampoco el contrato. Ya sé te resulto ingenuo ¿di? te debes estar riendo de mi preocupación, claro tendrán cosas más importantes que decir o escribir, entiendo, un profesor con su dilema de ingresar a la corrupción no es tu prioridad, es uno de los 20 mil que hay en la región y no salimos en la TV. si es que no estamos tomando en aulas, saliendo con alumnos (as) o si les pegamos a ellos, un examen no existe cuñao, esta bien te entiendo. Jódanse".

Lea http://www.federicoabril.blogspot.com/





miércoles, 4 de noviembre de 2009

La historia de la morena cantante



- Cómo se construye una historia de infamia contra un desconocido. Una diatriba de odio, no contra un hombre sentado, sino contra todo un pueblo echado.


La mujer observó que no podía tomar las fotos acostumbradas y empezó a buscar en su bolso de rojo y negro de “mariquita” con borlas de lana sobresalientes y con el cierre donde corresponden los pequeños dientes del animal en forma de mochila. Rebuscó y constató que no estaba. Entonces la cantante morena preguntó autosuficiente y con voz desgastada por haber cantado la noche anterior: “Búscala mujer, que no tengo todo el día” – le dijo para cortar la réplica que intentaba darle su asesora de imagen publicitaria que ya empezaba a desesperarse, no tanto por la máquina digital perdida y que quería utilizar para sacarle una foto a su jefa, sino por los gritos que empezaría a espetarle dentro de unos minutos. Puso la bolsa en el piso sucio del aeropuerto e intentó hacer una llamada con su celular antes que parta el avión que las llevaría de regreso a la capital. La morena se sentó altiva sin mirar a nadie, mientras una que otra mujer intentaba reconocerla pero dudando que se trataba de la artista que más le había cantado al desamor en las mujeres. Era como su diosa eventual para ese mayoritario porcentaje de despechadas que viven insultando al mal amor de los hombres por falsos, frívolos y hambrientos de purita carne que tanto había cantado en sus letras de criollada.


La muchacha marcó el número del hotel esperando que ahí encuentre una respuesta positiva. Le respondieron como se responde ante la inseguridad de no saber con precisión. “No sabemos”. Empezó a llover a manotazos, era las dos de la tarde, sin embargo en la mañana había estado caliente que, como si se tratase de un reloj y balanza, el cielo anunciaba que ponía las cosas en orden, ese orden también hacía retrasar los vuelos y en este caso no fue la excepción ni siquiera para la diosa de la criollada. La asistenta ahora sí empezó a temblar. Ella sabía que normalmente la morena no hablaba mucho porque había creído que hablar menos perduraba mejor su garganta, incluso alguna vez le comentó que no cantaría ni siquiera en el cumpleaños de su madre siempre y cuando no le pagasen. Eso lo podía confirmar porque en muy escasos programas de la televisión adonde le gustaba acudir la condición que imponía era no cantar a capela, no tanto porque algunas de sus colegas le habían dicho que no se merecía el rango que le habían insuflado, sino porque temía que los minutos en vivo podría restarle algo de dinero o voz.

Por eso cuando empezó a gritarle de su supuesta irresponsabilidad en la pérdida, ella empezó a verle en los ojos tan verdes como falsos, que estaba gritando de verdad. La asistenta no le quedó más remedio que acudir a la comisaría a poner la denuncia, ella también quiso ir para apurar con su prestancia internacional las gestiones de la Policía. Volvieron al aeropuerto esperando que los vuelos se normalizaran y en el trayecto y sin hablarse ambas mujeres pensaban en cómo podrían librarse del riesgo que sería ver las imágenes de la cámara fotográfica en Internet. Eran imágenes discretas, que no revelaban sino cuerpos regordetes paisajes de monte, comida tropical, gente cantando a coro y una que otra coquetería disforzada sumado a gestos obscenos. Pensó que llegaría las fotos a sus contrincantes de callejón o podrían ser vendidas al mejor postor de la basura televisión y su carrera supuestamente pulcra y diseñada en base a la identidad de todo un país, podría verse disminuida o de-repente destruida. En ese mismo norte y como coincidencia natural se encontraba pensando su asistenta que no pensó mejor idea que anticiparse a los acontecimientos y generar el escándalo del robo en banda.

Como muy buenas aprendices de la criollada – traducción- palomillada en serie y de callejón, creo la mejor artimaña asociando la fragilidad de algunos productores de una cadena nacional que no vieron mejor provecho que salir anunciado un desvalijamiento pomposo. Mientras tanto, el río serpenteaba en colores, en la ciudad los hoteles mostraban su mejor cara obediente a los buenos tiempos del turismo en la ciudad tropical y la gente seguía pensando que esta señora afro descendiente era uno de los mayores referentes de la cultura peruana. Y la gente de otros lugares así lo creyó también, por eso se armaron cadenas por Internet, lazos digitales anunciaban una vez más que los peligros habían cambiado el rostro angelical y verde que en un momento pintó la Amazonía. Las fulanas se rieron a carcajadas en los interiores de su habitación donde además duermen casi juntas pensando que habían puesto las cosas en su sitio. Llenaron de bebidas la habitación, chocolates y comida al paso para celebrar la victoria sobre los comunes, y, como en esas historias de antología policial que se convierten en la mejor cortina de humo que esconde escandalotes o levanta la imagen de alguien, en esta historia también resultó herido alguien. En realidad muchos, miles, cientos de miles, todo porque las damas así lo imaginaron en su afán de esconder esas fotos donde aparecen regordetes y flácidas.

Entonces no era tan morena, tampoco tan identificada con sus raíces, menos dama y menos buena artista, así lo demuestran sus antecedentes. No me molestaría ver algunas de esas fotos sueltas por ahí como una especie de venganza del Dios en el que no debe creer esta dama de la canción, menos mirar de frente cada domingo después de la misa.