miércoles, 6 de enero de 2010

Nuestro “pokemones”


La palabra Pokémon es la escritura con letras europeas de las japonesas: "ポケモン", que son una abreviatura de Poketto Monsutaa, que a su vez proviene del inglés Pocket Monsters, que quiere decir "monstruos de bolsillo". Esto viene del hecho de que, en el universo ficticio de la franquicia, los pokémon pueden ser transportados enpoké balls, las cuales se pueden encoger y ser guardadas en un bolsillo. La manga tuvo, o tiene aún, un éxito incalculable que se cuenta en millones de dólares y que ha trastocado la personalidad de la juventud actual a tal punto que será su referencia de aquí a uno años, como cuando muchos de nosotros observamos con nostalgia que “Meteoro”, “Candy” o “el Chavo del Ocho” son una especie de icono en nuestra historia infantil, algo similar representará sino lo hace ya, a las generaciones de ahora.

El pokemon son criaturas basadas en animales reales o criaturas míticas orientales hay 17 tipos y cada vez se van agregando más, es decir, mientras más éxito tienen, se reproducen y aprenden ataques distintos y movimientos nuevos y además se van ordenando en base al agua, fuego o hierba. En nuestra ciudad se ha inaugurado también los “mounstros de bolsillo” o en todo caso las modalidades de pokemones se han diversificado y ya no sólo corresponden a un sujeto – que en realidad parecen varios en la delincuencia en el distrito de Punchana – sino que aparecen en distintos ángulos de nuestra vida política social y hasta dirigencial.

Así tenemos por ejemplo, que en el Hospital Regional de Loreto hay toda una estrategia de los servidores públicos que han armado una campaña tan impresionante como descarada para defender lo indefendible, así, están tratando de salvar a siete ex trabajadores que han sido declarados culpables por procesos administrativos y penales por el delito de peculado doloso, es decir, robarle al estado con pana y elegancia y ahora pretenden – porque así se han acostumbrado con sus anteriores jefes – que haya impunidad y sean absueltos de las denuncias por el simple hecho de pertenecer al grupo de trabajadores que en bloque, siempre han sabido imponer sus condiciones y su cupos dentro del Hospital Regional. Ahora que un director nuevo y aparentemente decente, quiere acatar las normas que le obligan a despedirlos, le sacan los perros no sólo dirigenciales sino periodísticos para defender un imposible por puro capricho y maniqueas interpretaciones de un vocabulario rebuscado dentro de los considerandos de estas sanciones judiciales. Los pokemones acá se transforman para dar una apariencia de buenos o afectados por la justicia.

Los pokemones, así como las personas en la vida real, tienen una determinada cantidad de movimientos o ataques que pueden aprender, así por ejemplo, podemos encontrar que en campaña electoral un alcalde desesperado como Joiner Vásquez puede ser capaz de lanzarse a defender a uno de estos pokemones muy conocido como peligroso en Punchana y pretender que esa actitud no represente una afrenta a la paz de sus vecinos o peor aún intente pensar que su actitud le dará un aire de reformador y conciliador de la tranquilidad en su jurisdicción, una especie de Alex Kouri del Callao, pero sin un plan definido y difundido de recuperación de estos sujetos y sin el aval de los miles de vecinos que deben estar pensando que la autoridad ha entrado a una etapa de desvarío electoral.

Los hay también en la política electoral que ya se avecina, porque en esta tiras y en una especie de un juego de piedra, papel o tijera, los pokemones tipo agua tienen más probabilidades de ganarle al tipo fuego y este a su vez al hierba, así, podemos esperar que una agrupación relativamente grande y con posibilidades económicas termine por absorber a candidatos con vigencia popular o muy posicionados en la escena distrital y provincial y terminen por participar dentro de lo que ahora dicen no pertenecerían pero que la fuerza del poder económico de una campaña podría convocarlos, por ejemplo, un grupo pequeño o una figura representativa en la escena regional y provincial no podría competir contra la maquinaria que impondrá Fuerza Loretana o el APRA en las elecciones regionales en desmedro de Unipol o los nacionalistas sin pensar en grupos pequeños como el MIL, MERA, VALOR u otro que más allá de las fulgurantes figuras, no podrían sostener seguramente una campaña organizada económicamente para favorecer al grande. Es decir el “pokemón” grande se guarda en el bolsillo a las pokebolas.



Hay mounstros de bolsillo por todo lado y se muestran ahora en cada sector. Son de bolsillo porque parece que no afectan los valores extraviados de una sociedad pero en realidad sí lo hacen, por ejemplo, en el sector administrativo parece que un nombramiento de última hora y sólo por complacer a un sector minoritario sin el respectivo estudio legal, ha sido dado a los trabajadores administrativos del sector educación, porque existen más de 300 plazas que no están presupuestadas y que no tendrían el aval del Ministerio de Economía y sin embargo ya se les entregó la resolución y ya empezó la farra de los préstamos por doquier de estos servidores amparados en un nombramiento, que aún no ha sido ratificado. Sin hablar de lo que podría representar un caso de populismo, parece que los pokemones de bolsillo, pesaron más en la decisión última de darles el sí del nombramiento.

Lo mismo sucede en el aletargado y fatigado proceso de nombramiento que por fin viene culminando en el sector educación con los maestros desconcertados. Si el proceso empezó mal era evidente que terminaría mal. Los hechos de corrupción no demostrados, los cambios de reglamentos y directivas de último momento y el zafarrancho de cronogramas, lugares y condiciones para acceder a este proceso ha sido un buen argumento para que aparezca la criollada de un muy buen armado y viejo sistema caduco para dirigir estos procesos desde la administración estatal. Igual que en el Poder Judicial y a decir de su propio presidente, los lobos, ya son una especie rara, ni en extinción sino por el contrario parece que se han instaurado como una marca genética en los tuétanos de cada uno de nosotros Unos pokemomes camuflados.

Lea: ww.federicoabril.blogspot.com











2 comentarios:

Anónimo dijo...

El mayor pokemon es Alan García, es el mas peligroso, el malvado, el cruel, pobre Kouri que tanto le ayudo, le asesoro en temas de salud, educación, le respaldo con su gente en el Callao ahora como le paga, Alan es el Diablo tengan mucho cuidado.

Unknown dijo...

Alan le jugo sucio a Kouri, le hizo un enroqué en un pequeño descuido, quiere poner a su compadre Arana a la alcaldía de Lima y sacarlo a Kouri de contienda, para que el 2016 vuelva a palacio y se convierta en el primer presidente que gobierna el Perú por tercera vez, esta moviendo las piezas del tablero sin tomar en cuenta que Kouri puede atacar y hacerle un Jaque o quizá un mate.